Nuestra Señora del Tozal (antes San Esteban del Mall)
Al actual pueblo de San Esteban del Mall se llega por una pista de 4,5 Km. desde la Puebla de Roda, asfaltada durante 1,5 Km. y buena, pero en fuerte subida, el resto. Sin entrar en el pueblo, la pista continua en buen estado 1,5 Km. hasta casa Solana, antes de llegar a ésta hay que cruzar un campo a la izquierda y continuar unos centenares de metros por una pista ascendente en estado regular hasta unos campos, justo debajo del cerro donde está la iglesia, completamente visible. Allí hay que dejar el coche y cruzar los campos a pie hasta una casa en ruinas que se ve hacia el este. Detrás de la casa se encuentra el antiguo camino medieval que en unos diez minutos conduce al tozal donde se hallan las ruinas. Si el coche se ha dejado en casa Solana son quince minutos más. Las coordenadas UTM de la iglesia son 31 T 03006784 y 4685745.
Las ruinas de esta iglesia hacen pensar en un gran conjunto que quizás nunca se llegó a terminar. Conserva los muros del ábside semicircular sobre la cripta primitiva, excepto al norte, donde los restos están ocultos por la vegetación, y todo el muro lateral sur. De las bóvedas no hay restos.
Cabecera
Muro sur. Exterior
Del muro norte sólo queda un pequeño fragmento al oeste.
Restos muro norte
Adosado al sudeste hay un edificio de dos plantas.
Edificio adosado desde el sudeste
Debajo del ábside está la cripta, accesible por un agujero en el suelo, medio tapado por las zarzas. Tiene una ventana monolítica de medio punto con derrame hacia dentro. El interior muestra un aparejo más rústico que el resto del edificio y la bóveda construida con lajas.
Acceso a la cripta
Cripta
En el muro sur se ven cinco arcos formeros dovelados entre semicolumnas y pilastras que sostenían los arcos fajones que reforzaban la bóveda, que arrancaba de una imposta biselada, y dividían la nave en seis tramos.
Muro sur. Interior
Los arcos formeros son apuntados, excepto el situado más al este, donde está la puerta, que es de medio punto. Probablemente hubo otro en el último tramo a poniente, inapreciable por el deterioro del muro.
Muro sur. Interior
Junto al ábside hay la pilastra de la que partía el arco presbiterial, en los arcos fajones van alternando pilastras y semicolumnas.
En el segundo arco formero está la puerta, adintelada, que comunica con la planta superior del edificio adosado –la planta baja queda a nivel de la cripta-. En el tercero, hay otra puerta de arco de medio punto de escasa altura y medio tapiada.
Puerta secundaria en muro sur
En el cuarto, se abre una ventana abocinada con molduras, con el arco exterior de medio punto formado por una sola piedra; al interior, bajo la ventana, hay tres nichos. En el quinto, como se ha dicho, de medio punto, está la puerta, dovelada.
Portada. Exterior
Ventana en muro sur. Exterior
Las dovelas de la puerta están grabadas con inscripciones que no he conseguido descifrar.
Dovelas de la portada (1)
Dovelas de la portada (2)
En el tramo conservado del muro norte se aprecia también la imposta biselada de la que partía la bóveda.
Muro norte
En la semicolumna situada hacia el centro de la nave destaca la decoración de su capitel con bolas y aspas.
El edificio adosado, que algunos identifican con el castillo –cosa que no creo-, se levanta sobre una sala con puertas doveladas a este y oeste –ésta, medio tapiada-, cubierta con una bóveda de cañón levemente apuntada. Un arco fajón apoyado sobre un zócalo biselado, que se conserva al sur, divide este espacio, que posiblemente se utilizaba como paso para acceder a las puertas de la iglesia, ya que da al muro sur donde están situadas.
Bajos del edificio adosado
Sobre la sala citada hay un espacio rectangular cubierto también con bóveda de cañón, que se utilizó hace años como capilla dedicada a la Virgen del Carmen, una imagen de la cual ocupa la hornacina que preside el altar adosado al muro este. La bóveda de cañón está reforzada por un arco fajón que parte de una pilastra en el muro norte y de una ménsula biselada en el sur. Para acceder a la zona del presbiterio hay que subir un escalón. Todas las paredes de la capilla estaban enlucidas si bien ha caído el revocado en parte de la bóveda, permitiendo ver la buena cualidad de los sillares. La cabecera y el arco de medio punto que la enmarca están pintados con colores chillones. La capilla se iluminaba con dos ventanas de medio punto abiertas al sur (la cercana al altar tapiada) y otra al oeste, rectangular al interior y con arco de medio punto recortado en la piedra al exterior. A la izquierda de la entrada estaba la pila de agua bendita, que ha sido arrancada.
Capilla en el edificio adosado
Capilla en el edificio adosado. Aparejo de la bóveda
Sobre la parte noroeste de esta capilla se levanta un pequeño campanario de espadaña de un ojo, rematado por una imposta biselada.
Todo el aparejo de la iglesia y del edificio adosado es de buenos sillares bien escuadrados y pulidos, colocados en hiladas regulares, alternando algunas de sillares cuadrados y otras de más alargados. En la parte más alta del edificio adosado aparece algún fragmento de sillarejo más irregular.
La iglesia está rodeada por precipicios excepto por el este. La circunvala un estrecho sendero. Al este está el “Mall”, peñasco que da nombre al lugar y que debió albergar el castillo, si bien no se ven restos. Un muro a mitad de camino entre la iglesia y el supuesto castillo cerraría un amplio espacio donde posiblemente hubo un cementerio, pues toda la zona, que al parecer ha sido excavada, muestra abundantes huesos humanos diseminados.
El Mall desde la iglesia
Aparecen citados en 971 el lugar y la iglesia, que fue consagrada por el obispo Odesindo. Todo fue destruido en las incursiones musulmanas de principios del XI. Reconquistado definitivamente el lugar hacia 1013, se convirtió en sede de una canónica. La consagración definitiva del templo tuvo lugar en 1124. En el siglo XIV se debió abandonar el lugar. Los restos actuales del santuario son probablemente de avanzado el siglo XII, excepto la cripta que deben ser restos del edificio anterior. El notorio apuntamiento de algunos arcos y la decoración del capitel llevan a pensar en la influencia cisterciense.
Al principio, además de a San Esteban, estaba también dedicada a San Silvestre, pero la dedicación a San Esteban se olvidó hace siglos. El último matrimonio que abandonó en 1973 el actual pueblo de San Esteban del Mall únicamente identificaban como advocación de esta iglesia la Virgen del Tozal, la Virgen del Carmen o San Roque, en ningún caso recordaban que fuese San Esteban, nombre que sólo asociaban a la antigua parroquia del pueblo.
Bibliografía:
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Románico en Ribagorza 