San Martín de Capella
En la parte más alta del pueblo. Las coordenadas UTM de la iglesia son 31 T 285017 y 4674971
Iglesia de una nave cubierta por una bóveda apuntada sostenida por tres arcos fajones, también apuntados, apoyados en semicolumnas y en pilastras, y que arranca de una imposta lisa.
El ábside semicircular está cubierto con bóveda de cuarto de esfera. Exteriormente está rematado por una cornisa sostenida por 23 ménsulas decoradas, de las que se han perdido tres y la muchas de las restantes son inidentificables. Aún se aprecian una cabeza humana, otra demoníaca, una rosa de seis puntas, un escudo y una cruz.
En el centro del ábside hay una ventana de medio punto dovelada de doble derrame, no visible interiormente por el retablo.
Al sur del ábside hay añadida la sacristía, de época posterior, iluminada por una ventana al este.
La portada, en el muro sur, está formada por tres arquivoltas que envuelven las dovelas interiores, arrancando de una imposta sostenida por capiteles que han perdido las columnas. Las dos primeras arquivoltas son lisas, la última tiene a modo de guardapolvo una moldura de puntas de diamante.
Los capiteles tienen todos la misma decoración: unas hojas de palma. La imposta que sostienen tiene gravados entrelazados vegetales.
El único elemento figurativo es un ángel en el intradós del montante derecho.
En el izquierdo hay un entrelazado vegetal que Iglesias interpreta como una serpiente.
En el frontis, al oeste, hay una puerta tapiada que comunicaba con el cementerio, hoy sustituido por un jardín. Esta puerta es de arco de medio punto formado por dovelas y tiene un crismón trinitario en la clave.
En el muro norte, entre el frontis y la primera capilla, hay otra puerta de arco de medio punto, tapiada.
En el muro oeste hay también restos de un ojo de buey de época moderna, medio destruido al abrir el gran óculo que da luz al coro, y una ventana de medio punto tapiada, que tal vez pertenecía al campanario original, situado en el ángulo sudoeste.
Sobre el ábside se edificó en 1744 un campanario de torre mudéjar de ladrillo con azulejos en su último cuerpo. La base es de sillería. Tiene una ventana en cada cara, con campanas al sur, este y oeste. Las esquinas tienen forma de hornacinas, que debieron contener imágenes. Se accede al campanario desde el coro al otro extremo de la iglesia cruzando por encima de la actual bóveda.
Todo el interior está enyesado excepto el ábside.
En el lado sur se abren dos capillas cubiertas con bóveda de lunetos, comunicadas entre sí.
En el muro norte hay tres capillas. La más cercana al presbiterio es similar a las del lado sur.
La central cubierta por una cúpula que acaba con linterna al exterior. Entre ésta y la anterior se halla el púlpito.
La capilla norte situada más hacia los pies, dedicada a San Antonio Abad, muestra una sencilla bóveda de crucería.
Esta última capilla alberga una gran pila bautismal.
A la derecha de la puerta, sobre una pilastra, se levanta la pila de agua bendita, que por el tamaño más parece una pila bautismal reaprovechada.
A poniente se levanta el coro sobre arco rebajado al que se accede por una escalera en el muro sur.
El aparejo es cuidado, de sillares muy regulares, pulidos, dispuestos en hileras ordenadas, si bien es posible percibir alteraciones debido a las reformas sufridas. Los sillares más antiguos son de mejor calidad y muestran marcas de cantero (una cruz es la que se repite abundantemente). La parte superior de los muros laterales es mucho más rústica.
La cubierta es de tejas, que debió sustituir a la primitiva de losas cuando se sobreelevaron los muros laterales.
Los elementos arquitectónicos y escultóricos de la iglesia original (ábside, nave, portada) cabe fecharlos en el siglo XIII.
Debajo del coro hay otras tres pilas bautismales de origen altomedieval. La más alta procede de Torruella. Había otra, procedente de Bafaluy, que fue trasladada a Graus.
El altar mayor lo preside un retablo de dieciocho tablas de San Martín, de principios del XVI pintado por el portugués Pedro Núñes. Fue desmontado durante la guerra civil y montado de nuevo después en un nuevo armazón realizado a imitación del original. Por el contrato de 1527, que se conserva, se deduce que faltan algunas tablas, que podrían estar en la colección Muntredas de Barcelona. Ha sido restaurado recientemente.
Un retablo del siglo XV y otro del XVI dedicado a San Joaquín y Santa Ana fueron quemados en 1936.
Hay un frontal de altar de San Martín en el Museo Diocesano de Solsona que se cree pertenecía también a esta iglesia (antes se suponía que procedía de Binefar).
Capella fue reconquistada hacia 1080 por Sancho Ramírez. El primer señor fue Arnau Mir de Tost, pero pronto pasó a los Lierp y, a partir de 1174, a los Erill.
Bibliografía:
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IGLESIAS COSTA, Manuel: Arte Religioso del Alto Aragón Oriental, Arquitectura Románica, tomo II, Prames, Zaragoza, 2004, pp. 16-22.
MARTÍ FORNÉS, Francisco: Capella y su retablo, Editorial Pirineo, 2021.
MARTÍ FORNÉS, Francisco: Ribagorza. Guía básica de su románico, Editorial Pirineo, Huesca, 2022, pp.138-146.
MIGUEL BALLESTÍN, Pascual y MORTE GARCÍA, Carmen: Retablo de Capella, Prames, Zaragoza, 2000.